Una comunidad de propietarios debe tener como uno de sus pilares fundamentales la buena convivencia. La mayoría de los conflictos pueden evitarse si todos los vecinos mantienen una actitud respetuosa entre sí.
Sin embargo, en muchas ocasiones nos enfrentamos con desencuentros que se fundamentan en acciones que pueden ser reguladas mediante normas de régimen interno. Por ello es importante que se dedique un tiempo a plantear algunas reglas básicas de civismo comunitario que pueden evitar futuros problemas entre vecinos.
Y si ya no los podemos evitar, ¿Qué hacer? Primero, dialogar. Si no funciona y el vecino que disturba la comunidad no ceja en su actitud, existen acciones legales que se pueden adoptar, ya que la Ley de Propiedad Horizontal establece el proceso a seguir si se tratan de actividades molestas.
Desde CAFMadrid nos recuerdan los principales conflictos que se dan entre vecinos y cómo evitarlos:
EL RUIDO
Suele ser uno de los principales motivos de queja entre vecinos. Los ayuntamientos tienen ordenanzas para regular los decibelios en determinados horarios. Aunque también hay que tener cierta consideración y evitar hacer ruidos molestos como poner música muy alta o en caso de obras advertir a los vecinos sobre la duración aproximada.
LOS TENDEDEROS
Limpiar los cristales, fumar o tender la ropa muy mojada, sin considerar los perjuicios que pueda provocar a la ropa del vecino también es una de las quejas habituales en las comunidades.
LAS ZONAS COMUNES
Los lugares comunes como el portal, las escaleras, el garaje, los rellanos, etc. son responsabilidad de todos los vecinos. No se debe dejar los residuos en el rellano hasta la hora de bajar la basura ni tampoco tirarla al suelo.
LAS PUERTAS
Algunos descuidos pueden ser peligrosos y conllevar vía libre para los robos en viviendas. Asegurarse de haber cerrado de forma correcta las puertas de acceso o esperar a que se cierren las puertas del garaje son las principales precauciones de seguridad.
EL ASCENSOR
Otro de los principales focos de disputas son los ascensores. Retenerlo mucho tiempo para charlar, sobrecargarlo implicando averías o compartirlo con mascotas. Son problemas que se pueden evitar si pensamos en los demás.
LOS BALCONES
Así como no se deben tirar desperdicios al suelo, en un balcón o ventana también se aplican los mismos principios. Fumar y tirar la colilla, regar sin cuidado de no gotear al vecino de abajo son prácticas completamente evitables.